¿SOLUCIONES PARA EL SPAM, A LA AMERICANA?
En diciembre de 2003, el congreso de los EE.UU. aprobó una ley federal que tenía como intención principal, poder responder contra la demanda que muchos usuarios norteamericanos de Internet tienen con el correo basura. Pese a su inmediata entrada en vigor, dicha ley no parecía que fuera a ser útil, más bien un brindis al sol, con el único objeto de contentar al los futuros votantes para la elecciones a presidencia.
La flamante ley contra el 'spam' aprobada en los EEUU parecía cadáver, pero resulta que no; en una investigación distribuida entre agencias federales y autoridades locales decenas de sospechosos de cometer 'spam' (y fraudes por Internet) han sido detenidos. A cambio, y por primera vez, las autoridades estadounidenses actuando de oficio han desarticulado una red privada de intercambio de ficheros entre iguales (P2P). El gobierno estadounidense flexiona sus músculos legales en la Red; habrá que esperar a los resultados...
Sin duda ninguna que los internautas americanos agradecerán que las fuerzas del FBI, intenten protegerles de la inundación de correo basura que nos aflige. O sea que esta actuación del gobierno de los EE.UU. le parecerá bien a muchos.
Según las cifras del Departamento Federal de Justicia, casi el 50% del 'spam' mundial se origina en los EE.UU. O sea, en sus propias narices. Y para echar más gasolina la fuego, el origen de los mismos, proceden de las más importantes empresas y monopolios de comunicación, que en cierta medida están sufragando las campañas electorales de ambos candidatos, por igual, no vaya ser que se queden sin premio de la tarta. Y el porcentaje de correo basura en el total del tráfico sigue creciendo; más del 60% del correo es 'spam'. Pero sí que carga a las fuerzas del orden de aquel país con nuevas tareas de discutible utilidad, con la finalidad de defender por la violencia el obsolescente modelo de negocio de algunas grandes empresas. Claro que en mitad de la campaña electoral más reñida de la historia estadounidense, y tratándose precisamente de salvar a los grandes conglomerados de medios de comunicación, es fácil por qué ese interés en procesar a unas cuantas decenas de personas y hacer un escarmiento. Lo que no dicen y ocultan, es que son éstas empresas, como ya he dicho, las que en cierta medida cierran los ojos o miran para otro lado, pues ellas mismas practican esta detestable práctica.
¿Qué pasará con la legislación 'anti-piratería'?. Hasta la reciente aprobación de una nueva y discutida ley las acciones contra la violación de la propiedad intelectual necesitaban la denuncia de los perjudicados. Ahora la justicia estadounidense no necesita este trámite, y puede ir a por las redes P2P y demandar a sus participantes por lo civil. Lo cual, visto lo ocurrido con el 'spam', no garantiza en absoluto que la actividad en estas redes se vaya a reducir.
Hay problemas que ni las leyes más draconianas pueden resolver. Y la situación en España, no deja ser de lo más dramática. La famosa Ley de la Sociedad de Información o Ley de Internet, adolece del mismo problema, por lo que las soluciones legales, pasarían por una simple denuncia administrativa que al final termina en el cubo de una papelera. La ley no ha previsto nada para estos casos y únicamente, cabría el recurso a la denuncia ante la Agencia de Protección de Datos, pero aun en tales circunstancias, el resultado sería el mismo. Una denuncia ineficaz contra aquellos que aprovechándose de nuestras direcciones de correos, nos manda basura a raudales, de igual modo que cuando abro el buzón de mi casa: solo facturas y propaganda a raudales.
La flamante ley contra el 'spam' aprobada en los EEUU parecía cadáver, pero resulta que no; en una investigación distribuida entre agencias federales y autoridades locales decenas de sospechosos de cometer 'spam' (y fraudes por Internet) han sido detenidos. A cambio, y por primera vez, las autoridades estadounidenses actuando de oficio han desarticulado una red privada de intercambio de ficheros entre iguales (P2P). El gobierno estadounidense flexiona sus músculos legales en la Red; habrá que esperar a los resultados...
Sin duda ninguna que los internautas americanos agradecerán que las fuerzas del FBI, intenten protegerles de la inundación de correo basura que nos aflige. O sea que esta actuación del gobierno de los EE.UU. le parecerá bien a muchos.
Según las cifras del Departamento Federal de Justicia, casi el 50% del 'spam' mundial se origina en los EE.UU. O sea, en sus propias narices. Y para echar más gasolina la fuego, el origen de los mismos, proceden de las más importantes empresas y monopolios de comunicación, que en cierta medida están sufragando las campañas electorales de ambos candidatos, por igual, no vaya ser que se queden sin premio de la tarta. Y el porcentaje de correo basura en el total del tráfico sigue creciendo; más del 60% del correo es 'spam'. Pero sí que carga a las fuerzas del orden de aquel país con nuevas tareas de discutible utilidad, con la finalidad de defender por la violencia el obsolescente modelo de negocio de algunas grandes empresas. Claro que en mitad de la campaña electoral más reñida de la historia estadounidense, y tratándose precisamente de salvar a los grandes conglomerados de medios de comunicación, es fácil por qué ese interés en procesar a unas cuantas decenas de personas y hacer un escarmiento. Lo que no dicen y ocultan, es que son éstas empresas, como ya he dicho, las que en cierta medida cierran los ojos o miran para otro lado, pues ellas mismas practican esta detestable práctica.
¿Qué pasará con la legislación 'anti-piratería'?. Hasta la reciente aprobación de una nueva y discutida ley las acciones contra la violación de la propiedad intelectual necesitaban la denuncia de los perjudicados. Ahora la justicia estadounidense no necesita este trámite, y puede ir a por las redes P2P y demandar a sus participantes por lo civil. Lo cual, visto lo ocurrido con el 'spam', no garantiza en absoluto que la actividad en estas redes se vaya a reducir.
Hay problemas que ni las leyes más draconianas pueden resolver. Y la situación en España, no deja ser de lo más dramática. La famosa Ley de la Sociedad de Información o Ley de Internet, adolece del mismo problema, por lo que las soluciones legales, pasarían por una simple denuncia administrativa que al final termina en el cubo de una papelera. La ley no ha previsto nada para estos casos y únicamente, cabría el recurso a la denuncia ante la Agencia de Protección de Datos, pero aun en tales circunstancias, el resultado sería el mismo. Una denuncia ineficaz contra aquellos que aprovechándose de nuestras direcciones de correos, nos manda basura a raudales, de igual modo que cuando abro el buzón de mi casa: solo facturas y propaganda a raudales.
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